Hace años, cuando yo no podía imaginarme que al final acudiría a la donación de embriones para aumentar mi familia, me llamó mucho la atención una noticia que leí acerca de unas monjas italianas que habían colgado lo hábitos para tener un hijo a través de adopción y al final, se decantaron por esta técnica. Para ello acudieron a una clínica en Barcelona que fue la que logró que este tratamiento fuera conocido a nivel popular en España.
@Adina Voicu @Anilton
«Hay algunas que lo hacen por convicciones religiosas, que tienen problemas para someterse a las técnicas de reproducción asistida pero que no tienen problemas en adoptar, decía la dra López-Teijón en RTVE en el año 2005″
«La dra López-Teijón relata varias anécdotas transcurridas durante estos años, como la monja que dejó de serlo y llegó a su clínica “acompañada por religiosas de su comunidad” para adoptar un embrión, que se le implantó con éxito y le permitió ser madre. Fuente: Adopty.es«
A lo largo de los años he ido buscando artículos en los que se hablaba de cómo enfocaba la religión el tema de la reproducción asistida: en principio, sé que está en contra de ello, no tenemos nada más que escuchar al increíble obispo de Córdoba hablando de la reproducción asistida como un aquelarre. (no te pierdas el video completo)
Estoy segura de que no todos nos insultan así, pero llevado al extremo este es un pensamiento que proviene del espanto que a algunas religiones les causa la asistencia a la fecundación humana.
Por lo que yo he visto en estos años, aunque seguro que hay parejas o mujeres solas católicas por ejemplo que renuncian a la maternidad-paternidad si el niño no llega de manera espontánea, también hay muchas que acaban acudiendo a la reproducción asistida aún en principio, estar en contra de sus principios religiosos. Afortunadamente han conseguido hacer evolucionar sus pensamientos iniciales y adaptarlos al hecho de recibir asistencia médica y no puedo por menos que darles la enhorabuena. Realmente desconozco cómo ha sido ese proceso y me encantaría que si estás leyendo este artículo y tú lo has hecho, lo compartieras con nosotros para poder ayudar a otras parejas o mujeres en una situación como la vuestra.
¿Y qué ocurre en USA?
Por otro lado, siempre me llamo mucho la atención cómo era el proceso de donación de embriones en muchos estados de USA.
Quizás no sabéis que allí, existen varios tipos de donaciones: las anónimas completas como en España y las conocidas, provenientes de bancos de gametos o de personas del entorno de los pacientes.
Pero lo que a mí realmente me llamó la atención es que en el segundo caso, son las parejas donantes las que tienen la última palabra en cuanto a quiénes son las personas que digamos «adoptan» a sus embriones. Vi un reportaje en el que los que solicitaban la donación tenían que escribir cartas, grabar videos y en cierta forma convencer a la familia biológica del embrión que ellos eran los padres ideales.
@Sergey81
El vídeo ha sido imposible de encontrar ya que cuando lo vi, no era un tema cercano a mí y todavía no existía Creando una familia, peeero sí que tengo un artículo estupendo, con mucha información y testimonios de parejas que han donado sus embriones a personas que han elegido ellos y en el que vais a poder ver todo esto de lo que os estoy hablando ya que la mayoría aducen principios cristianos para donar sus embriones en el caso de unos y el adoptarlos en el caso de los otros.
Mira cómo empieza artículo , así es que no te lo pierdas. Promete.
«La mayoría de quienes han optado por el sistema lo consideran «salvar una vida» y su uso es cada vez más popular en Estados Unidos.
«La adopción de embriones», como se conoce comúnmente, es cada vez más popular en EE. UU., sobre todo en clínicas cristianas, donde los futuros padres muchas veces deben estar casados y ser heterosexuales para acceder al tratamiento»
Puedes leer el artículo completo aquí:
¿Conocías ya la opción de la donación de embriones? ¿si tienes algún tipo de cuestionamiento ético con respecto a ella? Como siempre anímate a comentar aquí abajo y, por favor, comparte el artículo en tus redes sociales.