Yo no sé a ti, pero a mí el exceso de juguetes is killing me softling…

A veces me siento como una abuela recordando con añoranza mis tiempos en los que teníamos pocos juguetes.

Cuando era pequeña, yo, como todos los niños quería más juguetes de los que tenía. Recuerdo que fueran los que fueran, los exprimía, lo cuidaba, los reinventaba.

Ahora que soy adulta valoro más todavía las cosas que éramos capaces de hacer con lo que teníamos. Por supuesto que me gusta que los niños tengan diferentes tipos de juguetes.

Pero, no sé…

¿que tengan sólo uno de cada es pedir demasiado?

Cuando observo a mis hijos en alguna de sus dos habitaciones y no están más o menos ordenadas, veo claramente el exceso de juguetes que hay.

Y yo os aseguro que prácticamente no compro ninguno.

Ver como ya no caben más construcciones, más playmobils; ver cómo hay unas 50 pinturas o ceras y un montón de diferentes tipos de rotuladores, yo misma me di cuenta de que es imposible que le denle algún tipo de valor a las cosas que tienen.

Se me ocurren cinco ideas para ver si consigo organizar este tema, a veces parecen:

1. Controlar los juguetes que recibe vía regalos o porque se los compré él
2. Cuando vea dos juguetes del mismo tipo guardar uno, si es algo de piezas pequeñas elegir una cantidad moderada y guardar el el resto.
3. Vaciar lo más posible la habitación, al menos dos veces al año.
4. Cada vez que entra un juguete nuevo, sale de nuestra vida alguno antiguo.
5. Convencer a las personas que les regalan cosas que es mejor juntarse varias y hacer un regalo de calidad que regalar cuatro cosas de calidad ínfimo.

Me gustaría mucho saber cómo te organizas tú con el exceso de juguetes ¡Necesito tu ayuda!